Permitirán acortar la distancia por asfalto entre localidades de las regiones Alto Neuquén, Vaca Muerta y Confluencia. “Dentro de dos semanas estaremos empezando una obra que es histórica y que va a acercar 100 kilómetros al norte neuquino”, anunció el gobernador Rolando Figueroa
En los próximos días se iniciarán obras de pavimentación del tramo de la ruta provincial 7 conocido como Cortaderas, que beneficiará principalmente a localidades de las regiones Alto Neuquén, Vaca Muerta y Confluencia. Así lo anunció el gobernador Rolando Figueroa, quien destacó que “dentro de dos semanas estaremos empezando una obra que es histórica”.
Los trabajos se ejecutarán con el acompañamiento de YPF. Luego de su finalización, quienes circulen por ahí tendrán una nueva vía pavimentada que les permitirá ahorrar unos 100 kilómetros de viaje.
“Dentro de dos semanas estaremos empezando una obra que es histórica, que es la ruta 7, y que va a acercar 100 kilómetros al norte neuquino”, dijo y destacó: “100 kilómetros menos van a hacer todos los vecinos del norte para poder ir a su casa; 100 kilómetros menos van a poder hacer para poder ir a visitar el norte neuquino”.
“Es una obra de más de 100 kilómetros que va a ser también histórica y que viene a complementar todo un desarrollo de infraestructura que estamos haciendo en las rutas del petróleo, más algunas acciones inmediatas que tenemos que corregir en virtud del retraso en infraestructura”, indicó el gobernador.
Reparación histórica:
La pavimentación de la ruta por Cortaderas es un anhelo histórico de los habitantes del norte neuquino, ya que esta obra permitirá acortar el recorrido actual, reducir las horas de viaje, abaratar costos y establecer una mayor vinculación con otras regiones de la provincia, entre ellas las de Vaca Muerta y Confluencia.
No contar con ese tramo de la ruta asfaltado determina que la gran mayoría de los usuarios opte por viajar a Neuquén -para realizar trámites, recibir atención médica de complejidad, visitar a sus afectos o simplemente hacer compras- a través de las rutas nacionales 40 y 22. Dependiendo de la localidad de residencia, los habitantes del Norte de la Provincia tienen que recorrer entre 400 y 550 kilómetros para comunicarse con la ciudad capital.
Hoy el asfalto llega unos kilómetros antes de la zona de Punta Carranza y el resto de la traza, hasta el empalme con la ruta nacional 40 en Auquinco, es de tierra. En esos casi 100 kilómetros a pavimentar viven neuquinos dedicados a las tareas del campo y la trashumancia. En los últimos años también se instalaron locaciones hidrocarburíferas, incrementando el flujo vehicular en la zona.
Avanzar con este proyecto tiene múltiples beneficios que incluyen desde razones económicas y de seguridad vial hasta cuestiones sociales como acortar las distancias, integrar a las regiones y fomentar el turismo en destinos emergentes. Además, disponer de esta ruta asfaltada permitiría generar otra conexión por vía terrestre con la provincia de Mendoza, beneficiando directamente a las comunidades de Buta Ranquil y Barrancas.
Pavimentación de Cortaderas: en los próximos días comenzarán las obras
