El sector sanitario consume alrededor de 15 millones de toneladas de plástico por año a nivel mundial. Es necesario repensar su uso y buscar alternativas sostenibles donde sea posible, sin comprometer la seguridad.
Como parte de las acciones realizadas por el Día Mundial del Medio Ambiente, que fue el 5 de junio, la dirección general de Salud Ambiental y Cambio Climático (DGSAyCC) organizó un taller destinado a los agentes de salud donde se trabajó el interrogante “¿Qué podemos hacer desde el sector Salud?” partiendo del lema Poner fin a la contaminación por plásticos en todo el mundo.
La actividad se hizo presencial en el auditorio Adriana Novoa del Centro Administrativo Ministerial – CAM y de forma virtual. Durante la apertura el equipo de la DGSAyCC explicó la importancia de dar herramientas, generar redes, contactarse, consultar y preguntar sobre las acciones que se vienen implementando en los lugares de trabajo para ser más amigables con el ambiente. En la provincia se viene abordando la temática y es importante el trabajo y la participación de cada uno, ya que, de esa manera se pueden lograr cambios en nuestras prácticas, incorporando la perspectiva del cambio climático y el cuidado del medio ambiente en todas nuestras acciones.
Andrea Echauri, referente de la dirección general de Salud Ambiental y Cambio Climático hizo extensiva la invitación para participar de la Mesa de Cambio Climático y Salud, donde se abordan cuatro líneas de trabajo: establecimientos de salud verdes y saludables, eficiencia energética, reciclado y separación de residuos en origen, y compras sustentables.
Manifestó que de manera sostenida desde el año 2022, se viene trabajando sobre eficiencia energética, residuos, así como en medir la huella de carbono de nuestras instituciones lo que nos permite trabajar en los mecanismos de adaptación y mitigación necesarios para tener establecimientos de salud resilientes al cambio climático e identificar nuestra contribución con los gases de efecto invernadero y propiciar las acciones necesarias para su disminución.
“Sabemos que el cambio climático incide en la salud de nuestras poblaciones, que afecta con mayor intensidad a los grupos más vulnerables (adultos mayores, niños, mujeres), y que tiene efectos en patologías cardiovasculares, respiratorias, mentales y metabólicas”, indicó.
Plásticos en el sector salud:
El sector sanitario consume alrededor de 15 millones de toneladas de plástico por año a nivel mundial. Es necesario repensar su uso y buscar alternativas sostenibles donde sea posible, sin comprometer la seguridad. Gran parte se utiliza en procesos de atención, como guantes, jeringas, botellas de alcohol, sachet de suero, etc. También se generan residuos no médicos, como platos descartables, botellas plásticas, bolsas, y artículos de tocador de un solo uso.
¿Qué acciones llevar adelante desde el sector salud?
Generar políticas sanitarias integradas que aborden la problemática.
Hacer compras sustentables, evitando envoltorios plásticos innecesarios.
Usar bolsas reutilizables (como las de tela) para ropa y otros insumos.
Separación adecuada de los residuos plásticos para su posterior reciclaje.
Reutilizar envases aptos para procesos de desinfección y esterilización.
Promover la capacitación y participación activa en la Mesa de Salud y Cambio Climático.
Experiencias:
Durante más de dos horas, se intercambiaron experiencias, información, y se reflexionó sobre la temática.
La primera charla sobre reducción del uso de guantes de látex, estuvo a cargo de Elvia Tillería Lic. en control de infecciones del nivel central. La gestión de los residuos hospitalarios es fundamental para proteger la salud pública, prevenir la contaminación, cumplir con las leyes y regulaciones. Todo el personal de salud es responsable de la adecuada eliminación de los desechos que se generan en los establecimientos, y es necesario ser consciente de la importancia de su correcta separación, tratamiento, cumpliendo con las regulaciones y estándares establecidos.
En relación al uso de guantes de látex, Tillería explicó que de acuerdo a la OSM el lavado de manos es la medida más efectiva para prevenir las infecciones, y el uso de guantes en salud debe ser considerado como una medida de prevención secundaria, y no como sustituto del lavado de manos. Además, recordó que el uso indebido y excesivo de guantes puede convertirse en un riesgo para la salud tanto del paciente como del personal sanitario.
Plantean que es posible reducir su utilización, entendiendo que los guantes deben reservarse para situaciones específicas donde haya riesgo de contacto con fluidos corporales o en contacto con piel no intacta. El uso incorrecto aumenta los costos, genera más residuos, y una falsa sensación de seguridad. En resumen, es posible disminuir el uso de guantes en salud, siempre bajo la premisa de evaluar los riesgos, priorizar la higiene de manos, y cambiar los guantes entre pacientes y/o procedimientos.
La segunda exposición estuvo a cargo de la Lic. Érica De Andrade, referente del comité de control de infecciones Hospital Cutral Co, que contó la experiencia de Hospital Cutral Co / Palza Huincul sobre el reciclado de plásticos en el ámbito hospitalario y expresó que abordar la problemática de los plásticos es importante porque se trata de un residuo que tarda mucho en degradarse y contamina.
Recordó que la institución se convirtió en miembro activo de la Red Global de Hospitales Verdes y Saludables por el proyecto de reciclaje hospitalario «Hospital Amigo del Medio Ambiente», comprometido en trabajar con residuos, energía, alimentos y compras sostenibles.
Se comenzó a implementar un Plan Integral, se instaló un lugar de acopio, se determinó una logística, se reemplazaron bolsas de plástico por bolsas de tela reutilizables y los elementos de cocina descartables como bandejas y film, se crearon redes con otras instituciones y empresas, entre otras acciones más. La dedicación y el trabajo se ve reflejado en las estadísticas del 2023 al 2025 se recolectaron 2.222kg totales de plástico en el sector salud.
Por último, Mauricio Huentequeo, del área de educación de la secretaría de Ambiente contó la experiencia y evolución de la iniciativa del CAM sostenible y sustentable, sobre compostaje y segregación de residuos orgánicos en los edificios.
Se comenzó en 2022 con tres composteras en el predio, y hoy el CAM ya cuenta con 10 composteras y continúan construyendo más. El trabajo lo realiza la Dirección de Educación Ambiental de la Subsecretaría de Ambiente y el personal del Servicios de Bufetería y Maestranza del Ministerio de Salud, depositando los residuos orgánicos. El Compost producido se usa para alimentar el suelo del predio, favoreciendo a los árboles actuales y futuros. El resto de los residuos se disponen en contenedores de basura con tapa que son recolectados por el municipio, y además se cuenta con un punto de recolección de cartones.
Otra de las acciones que se implementó fue solicitarles a los trabajadores que se desempeñan en el CAM que traigan sus propios utensilios y evitar así la compra de descartables de plástico.